Protección con plástico de burbujas vs protección de espuma

Hay muchas maneras de proteger un producto dentro de una caja. Quizás la forma más popular es la protección con plástico de burbujas, pero la protección con espuma proporciona igualmente protección a tus productos. Pero entonces, ¿cuándo escoger uno u otro?

Y es que aunque ambos parecen productos similares, tienen propiedades distintas, y en este post te vamos a guiar para elegir el material de protección adecuado y más eficiente para tus productos.

Protección con plástico de burbujas

El plástico de burbujas es uno de los materiales de embalaje más populares y utilizados, probablemente sea también con el que estás más familiarizado. Es ligero, de bajo coste y ofrece una excelente protección con una capa de burbujas de aire acolchadas que cubren el producto. Su excelente amortiguación y propiedades de protección se produce gracias a cientos de pequeñas burbujas de aire dentro de las capas de polietileno.

Está disponible en muchos formatos diferentes, el más común son los rollos de plástico de burbujas, que permite ser cortado fácilmente a la medida que se requiere en cada momento. Se puede usar para todo tipo de propósitos dependiendo del tamaño de la burbuja; 10 mm de diámetro calidad 50 gr/m² para envolver y proteger productos uniformes y ligeros, 25 mm calidad 100 gr/m² para envolver y proteger productos frágiles, pesados y/o con ángulos cortantes.

Se pueden encontrar también film plástico de burbujas 50% reciclado, antiestático, isotérmico, bullkraft…

Existe también la opción de plástico de burbuja precortado, disponible en tamaños diferentes para que escojas el que mejor se adapte a tus productos. Esta opción es ideal para proteger objetos de tamaño similar, también debido a que se cortan en tamaños establecidos se puede controlar mejor la porción de plástico de burbujas en cada empaquetado para evitar así un exceso de embalaje.

También se puede encontrar las cajas dispensadoras de plástico de burbujas, hacen que el proceso sea aún más fácil y mantienen el orden y protegen del polvo.

Para artículos más pequeños, las bolsas de plástico de burbujas ofrecen todas las ventajas protectoras pero en una bolsa útil, perfecta para proteger artículos pequeños que pueden meterse fácilmente en el interior de la bolsa. Se pueden sellar con una tira adhesiva, sellador de calor o cinta adhesiva, y una vez selladas, proporcionan una amortiguación completa y protege el contenido. También hay disponibles bolsas específicas, como bolsas de burbujas antiestáticas, perfectas para dispositivos electrónicos delicados, tales como smartphones, equipos informáticos y componentes electrónicos.

El film plástico de burbujas es un material de embalaje muy versátil y por eso es una de las principales razones por las que es tan popular. Con la amortiguación de burbujas de aire que ofrece, puede proteger todo, desde artículos pequeños hasta la protección de alto rendimiento para artículos frágiles como la cerámica o el vidrio.

Sin embargo, si vas a enviar artículos pulidos, deberías tener en cuenta que el film plástico de burbujas puede dejar pequeñas marcas que pueden ser difíciles de quitar, causadas por las pequeñas burbujas de aire que presionan sobre tu artículo. Los materiales como el metal, el vidrio o la madera son susceptibles a ello, por lo tanto, si envías artículos hechos con estos materiales debería considerar otra opción como la protección con espuma foam.

Protección con espuma foam

La protección de espuma es menos conocida que la del plástico de burbujas pero ofrece una protección asombrosa siendo un material muy ligero y delgado. Diminutas burbujas de aire dentro de la espuma proporcionan una amortiguación excelente.

La espuma no acumula ni polvo ni pelusa y, además, no es abrasiva, lo que significa que no raya ni deja ninguna marca. Esto la hace perfecta para envolver artículos pulidos y brillantes como el metal, el vidrio o la madera, protegiendo contra roces y raspaduras en la superficie.

Tiene menos probabilidades de generar electricidad estática que el plástico de burbujas debido a la forma en la que está construido, lo que la hace mejor para los productos electrónicos y sensibles a la electricidad. Se puede laminar para darle propiedades adicionales también, como resistencia a la perforación o para mejorar su estética. Si estás buscando un material que pueda reutilizarse, la espuma es la elección perfecta, conservando sus cualidades protectoras debido a la forma en la que está fabricado.

Al igual que el plástico de burbujas, la protección en espuma está disponible en diversos formatos. La más común es la  protección de espuma en rollos. Se puede cortar a medida y usar para envolver, separar y aislar. Es ligero y fácil de manejar, por lo que se puede usar para envolver y proteger los artículos de formas variadas de una manera similar a la burbuja.

La protección de espuma también está disponible en hojas cortadas, lista para usar en tamaños precortados para envolver artículos o para separar productos dentro de la caja de cartón.

Las planchas de espuma son otro tipo de protección con espuma, se pueden usar para reforzar, bloquear, separar artículos o reforzar esquinas. Estos ofrecen refuerzo sólido e irrompible para paquetes y son ideales para proteger elementos delicados y grandes como, por ejemplo, muebles. Están construidos de una manera que los hace más sólidos que las láminas de espuma, es muy fácil de cortar y trabajar, es ligero y puede usarse muchas veces.

¿Qué material es el adecuado para tus productos?

Ambos materiales son muy buenas opciones para proteger tus productos, pero tienen diferentes propiedades que los hacen mejores para diferentes usos. Recomendamos utilizar el material adecuado para el propósito correcto, por lo que cuando decidas cuál elegir, evalúa para qué lo vas a usar antes de realizar la compra.

El film plástico de burbujas es un gran protector integral. Con su amortiguación de burbujas de aire brinda una gran capa de protección tanto si se envuelven artículos ligeros o productos pesados ​​y frágiles. Pero debes tener en cuenta que puede dejar marcas en superficies pulidas y con brillo.

La protección con espuma es más delgada y ligera que el plástico de burbujas, lo que significa que puedes almacenar más metros cuadrados en tu almacén y ocupará menos espacio en los envases de cartón. Es perfecto si está enviando artículos delicados con superficies pulidas de primera calidad, ya que su textura suave no dejará una sola marca en los productos.

Si quieres saber más sobre embalaje de protección y asegurarte de si la burbuja o la espuma es la elección correcta para tus productos, consulta a nuestros especialistas en embalaje en el 902 20 30 06, o visita nuestra web www.rajapack.es